ODAS DE HORACIO- LIBRO II- XX A MECENAS
3 participantes
EL AMANECER DE LA POESIA DE EURIDICE CANOVA Y SABRA :: Poesía Lírica-Canciones-Romances-Sonetos :: Oda-Elegía-Égloga
Página 1 de 1.
ODAS DE HORACIO- LIBRO II- XX A MECENAS
XX A MECENAS
Con alas potentes y nunca vistas, poeta de dos formas, hondiré el azul espacio, sin detenerme largo tiempo en la tierra, y más grande que la envidia, abandonaré sus ciudades. Yo, nacido de humiles padres, y a quien tú, Mecenas, llamas amigo, no moriré del todo, ni me veré rodeado por las ondas de la Estigia.
Ya Ia áspera piel se endurece sobre mis piernas; ya de medio cuerpo arriba me transformo en blanco cisne, y las plumas suaves me nacen por los dedos y los hombros.
Ya más presto que Ícaro el de Dédalo, cantor alado, visitaré las playas donde gime el Bósforo, las sirtes de Getulia y los campos Hiperbóreos.
El morador de Colcos, el dacio que disimula el miedo que le infunden los ejércitos marsos y los remotos gelonos, oirán mi nombre; el docto ibero y el que bebe las aguas del Ródano aprenderán mis canciones.
Que no se oigan acentos tristes ni quejas lastimosas, ni Ilantos desolados en mis vanos funerales; refrena tus clamores y no me prodigues las pompas inútiles del sepulcro.
Con alas potentes y nunca vistas, poeta de dos formas, hondiré el azul espacio, sin detenerme largo tiempo en la tierra, y más grande que la envidia, abandonaré sus ciudades. Yo, nacido de humiles padres, y a quien tú, Mecenas, llamas amigo, no moriré del todo, ni me veré rodeado por las ondas de la Estigia
Ya Ia áspera piel se endurece sobre mis piernas; ya de medio cuerpo arriba me transformo en blanco cisne, y las plumas suaves me nacen por los dedos y los hombros.
Ya más presto que Ícaro el de Dédalo, cantor alado, visitaré las playas donde gime el Bósforo, las sirtes de Getulia y los campos Hiperbóreos.
El morador de Colcos, el dacio que disimula el miedo que le infunden los ejércitos marsos y los remotos gelonos, oirán mi nombre; el docto ibero
Que no se oigan acentos tristes ni quejas lastimosas, ni Ilantos desolados en mis vanos funerales; refrena tus clamores y no me prodigues las pompas inútiles del sepulcro.
Roana Varela- Moderadora
- Cantidad de envíos : 4487
Puntos : 55478
Fecha de inscripción : 25/10/2012
blackray- Cantidad de envíos : 345
Puntos : 43708
Fecha de inscripción : 16/03/2013
sabra- Admin
- Cantidad de envíos : 16986
Puntos : 97327
Fecha de inscripción : 30/05/2009
Temas similares
» ODAS DE HORACIO- LIBRO II- XII A MECENAS
» ODAS DE HORACIO-LIBRO I -A MECENAS
» ODAS DE HORACIO-LIBRO I - XX A MECENAS
» ODAS DE HORACIO- LIBRO III- XVI A MECENAS
» ODAS DE HORACIO- LIBRO III- VIII A MECENAS
» ODAS DE HORACIO-LIBRO I -A MECENAS
» ODAS DE HORACIO-LIBRO I - XX A MECENAS
» ODAS DE HORACIO- LIBRO III- XVI A MECENAS
» ODAS DE HORACIO- LIBRO III- VIII A MECENAS
EL AMANECER DE LA POESIA DE EURIDICE CANOVA Y SABRA :: Poesía Lírica-Canciones-Romances-Sonetos :: Oda-Elegía-Égloga
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.