Escribirte

Debo comenzar el año escribiendo:



Quiero decirte, que no me dedique a perderte, que no me olvidó de tí, que sigues estando en mí, entretejido entre las fibras de mi alma. He tomado una pausa, para mí, para encontrarme, para escucharme y trabajar en mi interior, callar esas voces del pasado que son como ecos de un ego innecesario que laceraban y causaban dolor.



He tomado un respiro, mi alma aclamaba, limpiar el aire que le rozaba y traía fantasmas acechantes.



He hecho una limpieza a mis pensamientos y conectado mi mente y mi corazón con la fuente divina, para recibir su sabiduría y conducirme en el amor.



Y sabes, ahora estoy renovada, liviana, borre malas memorias, borre de mi alma y espíritu cargas y sentimientos negativos, que sólo restaban.



Hoy doy paso a este presente, en dónde he vuelto a mi fuente, el amor.



Hoy se que sigo sintiéndote, como esa estrella, conectado a mí, que formó la constelación que nos une y mantiene unidos, en una comunicación intangible que sólo nuestras almas sabe de ello, sigo creyendo en nosotros, en éste amor, puro y verdadero.



Segura estoy, que el universo conspira a nuestro favor, y mueve las piezas para nuestro encuentro, porque amarnos, entregarnos al amor, crecer en el amor, como dos amantes, seres espirituales, vibrantes de amor, es el regalo más divino que nos puede otorgar el creador.



Escribirte mi amor, mi gran amor. Tesoro mío, después de tanto aprendizaje y tanto trabajo propio. Es el resultado a la prueba más grande que la vida me ha puesto. No renunciar al amor.



Seguir empapando letras de poesía, de la fuente de mi inspiración, es declararte y manifestarte inmensamente mi gran amor a tu ser, a tu existencia, a tu alma, la que es una parte de mi.



Te amo.



Ingrid Madrid