Los Libros
EL AMANECER DE LA POESIA DE EURIDICE CANOVA Y SABRA :: Grandes Poetas y Escritores Consagrados :: Talentos de la Poesía :: Francisco Alvarez Hidalgo
Página 1 de 1.
Los Libros
Los Libros
Los caballeros del saber me esperan,
austeros y serenos, alineados
tran los cristales en los anaqueles.
Oasis solitario,
en la aridez de nuestros días grises,
son el frescor umbroso de los álamos
y la joven canción pura del agua,
dulce al correr y suave en el remanso.
Bajo la ruda y desigual coraza,
unos albergan el pensar del sabio,
-noches de insomnio, entrega concentrada
al lento, espiritual, difícil parto-.
En otros arde soterrado el fuego,
prometedor o amargo,
que caldeó los miembros ateridos,
o supo fiel iluminar el paso.
Saben de mí; soy buen amigo suyo;
me llaman con sus gritos apagados.
Piden conversación sincera y muda,
como apretón de manos.
En la sorda pelea de las horas,
duro quehacer diario,
jamás puedo sentir lejos el mundo,
porque el mundo está, en ellos, a mi lado.
Aguardais mi saludo, camaradas;
y el tiempo consumido en el trabajo
es común enemigo, al impedirme
volver a saludaros.
Pero vosotros, como viejos robles,
firmes, inalterables, solitarios,
aguardais a la vera del sendero,
no teneis prisa, no fijais horario.
¡Gracias, amigos, yo también os dejo
en las puertas del alma el paso franco!
Francisco Álvarez Hidalgo
Los caballeros del saber me esperan,
austeros y serenos, alineados
tran los cristales en los anaqueles.
Oasis solitario,
en la aridez de nuestros días grises,
son el frescor umbroso de los álamos
y la joven canción pura del agua,
dulce al correr y suave en el remanso.
Bajo la ruda y desigual coraza,
unos albergan el pensar del sabio,
-noches de insomnio, entrega concentrada
al lento, espiritual, difícil parto-.
En otros arde soterrado el fuego,
prometedor o amargo,
que caldeó los miembros ateridos,
o supo fiel iluminar el paso.
Saben de mí; soy buen amigo suyo;
me llaman con sus gritos apagados.
Piden conversación sincera y muda,
como apretón de manos.
En la sorda pelea de las horas,
duro quehacer diario,
jamás puedo sentir lejos el mundo,
porque el mundo está, en ellos, a mi lado.
Aguardais mi saludo, camaradas;
y el tiempo consumido en el trabajo
es común enemigo, al impedirme
volver a saludaros.
Pero vosotros, como viejos robles,
firmes, inalterables, solitarios,
aguardais a la vera del sendero,
no teneis prisa, no fijais horario.
¡Gracias, amigos, yo también os dejo
en las puertas del alma el paso franco!
Francisco Álvarez Hidalgo
Karla Benitez- Moderadora
- Cantidad de envíos : 2991
Puntos : 51278
Fecha de inscripción : 22/03/2013
Temas similares
» Hay Libros Que Se Escriben...
» HAY LIBROS QUE SE ESCRIBEN...
» LOS LIBROS DE HOMERO
» ¡Esos libros!,,,,
» Ciertos libros
» HAY LIBROS QUE SE ESCRIBEN...
» LOS LIBROS DE HOMERO
» ¡Esos libros!,,,,
» Ciertos libros
EL AMANECER DE LA POESIA DE EURIDICE CANOVA Y SABRA :: Grandes Poetas y Escritores Consagrados :: Talentos de la Poesía :: Francisco Alvarez Hidalgo
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.