10 curiosidades de Miguel de Cervantes

10 curiosidades de Miguel de Cervantes


Uno de los más grandes escritores de la literatura de todos los tiempos es, sin lugar a dudas, el madrileño Miguel de Cervantes Saavedra, la pluma que dio forma a la obra más leída y traducida en castellano: Don Quijote de la Mancha (1605).

Esa novela de caballería, muy por encima en cuanto a popularidad respecto a otras que escribió de la talla de La Galatea (1585) o Rinconete y Cortadillo (1612), fue la que le dio nombre internacional y la que le ha convertido en una figura conocida y alabada en todo el mundo. Sin embargo, a pesar de ese éxito, no son demasiados los datos que sabemos de él, aparte de que fue conocido como el Manco de Lepanto porque durante esa batalla un trozo de plomo le seccionó un nervio de la mano izquierda.

Por eso, ahora queremos ahondar un poco más en su figura y descubrir curiosidades que no todo el mundo ha llegado a saber:

Era tartamudo, como así dio a conocer él mismo en el prólogo de sus Novelas ejemplares, y eso le originó numerosos problemas para relacionarse con los demás.

Para leer parece ser que usaba anteojos, pero estos se le rompieron y eran tan caros en aquella época que no pudo repararlos.

Aunque existen numerosos dibujos y pinturas que le retratan, lo cierto es que ninguna en realidad es cierta, ya que no hay testimonio certero de cuál era su apariencia.

El primer poema que publicó estaba dirigido a la Infanta Catalina Micaela.

El 26 de septiembre de 1575, junto a su hermano Rodrigo, fue hecho prisionero por una flota turca mientras regresaba a España desde Nápoles. Desde entonces pasó cinco años como esclavo e intentó escapar en cuatro ocasiones, lo que hizo que tuviera que sufrir numerosas torturas como consecuencia de esas huidas infructuosas. Finalmente fue liberado el 19 de septiembre de 1580 después de que los padres trinitarios pagaran por él 500 escudos.

Otro de los grandes escritores de la literatura universal es el británico William Shakespeare, que manifestó ser un ferviente seguidor de la obra de Cervantes. Tanto es así que utilizó el nombre de uno de los personajes que aparecen en Don Quijote para darle título a su obra Historia de Cardenio (1613).

Aunque ahora es cuando más estamos hablando de corrupción política y en las altas esferas administrativas, no es algo novedoso. Precisamente este autor que nos ocupó fue ingresado en prisión al comprobar que existían irregularidades en las cuentas que llevaba como recaudador de impuestos.

El escritor fue vecino en Madrid de otras dos grandes plumas de la literatura española como son Lope de Vega y Francisco Quevedo, concretamente vivían en las mismas calles del famoso Barrio de las Letras.

Su novela más importante, la que toma como protagonista al ingenioso hidalgo y a su fiel escudero Sancho Panza, se calcula que tiene, aproximadamente, unas 380.000 palabras.

Hay varias obras teatrales de Cervantes, concretamente comedias, que en su momento se representaron con gran éxito pero que, con el paso del tiempo y por determinadas circunstancias, han acabado perdidas. Este sería el caso de Las semanas del jardín o El famoso Bernardo.

Publicado por María Merino
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