APRENDEMOS A HACERNOS VIEJOS
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APRENDEMOS A HACERNOS VIEJOS
APRENDEMOS A HACERNOS VIEJOS
Cuando aprendemos a hacernos viejos
aprendemos cuan valioso es el silencio,
cuanto vale una caricia en el cabello
y los besos que dibujan ternuras en la frente.
Cuando aprendemos a hacernos viejos
ya no importa cuan amena sea la compañía,
basta con la trivial presencia de un galgo triste
o la palabra vana de un chiquillo inocente.
Cuando aprendemos a hacernos viejos
la experiencia copa todos los volúmenes
escritos en los libros de los años,
entonces no sabemos como obsequiarle al mundo
de todo ese saber que tanto hemos guardado.
Cuando aprendemos a hacernos viejos
el miedo de la muerte nos toma por sorpresa,
el paso se hace lento,
la vida se atesora como caudal de risa alegre
y bebemos la esperanza, renovada cada día
de fresca fuente.
Cuando aprendemos a hacernos viejos
aprendemos cuan valioso así es el tiempo,
cuanto vale la distancia de un abrazo
y el dulce calor de un "te quiero".
Cuando aprendemos a hacernos viejos
se hace cálida la lluvia del invierno
y acostados en un colchón de nubes blancas
aprendemos a dormir el sueño que antes
no fue nuestro.
ELECTRA
Cuando aprendemos a hacernos viejos
aprendemos cuan valioso es el silencio,
cuanto vale una caricia en el cabello
y los besos que dibujan ternuras en la frente.
Cuando aprendemos a hacernos viejos
ya no importa cuan amena sea la compañía,
basta con la trivial presencia de un galgo triste
o la palabra vana de un chiquillo inocente.
Cuando aprendemos a hacernos viejos
la experiencia copa todos los volúmenes
escritos en los libros de los años,
entonces no sabemos como obsequiarle al mundo
de todo ese saber que tanto hemos guardado.
Cuando aprendemos a hacernos viejos
el miedo de la muerte nos toma por sorpresa,
el paso se hace lento,
la vida se atesora como caudal de risa alegre
y bebemos la esperanza, renovada cada día
de fresca fuente.
Cuando aprendemos a hacernos viejos
aprendemos cuan valioso así es el tiempo,
cuanto vale la distancia de un abrazo
y el dulce calor de un "te quiero".
Cuando aprendemos a hacernos viejos
se hace cálida la lluvia del invierno
y acostados en un colchón de nubes blancas
aprendemos a dormir el sueño que antes
no fue nuestro.
ELECTRA
Karla Benitez- Moderadora
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Fecha de inscripción : 22/03/2013
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